Según datos recogidos por el Módulo de Salud de la Encuesta de Condiciones de Vida 2023, tan solo el 37,7% de la población española (a partir de 16 años) realiza ejercicio. Este porcentaje es muy alarmante, ya que nos indica que la mayor parte de la población no ejercita su cuerpo y, por consiguiente, no logra mantener una vida realmente sana.
Si estás interesado en empezar a entrenar y lograr crear un hábito, te recomendamos que sigas leyendo este post. El día de hoy te explicaremos cómo se consigue crear este hábito, para que puedas llevar una rutina de entrenamiento semanal, te pongas en forma y cuides tu salud.
¿La “motivación” de ciertas fechas es realmente motivación?
¿Quién no ha dicho a principios de años que se iba a poner en forma y que iba a salir a correr o a ejercitarse a diario? También está el clásico fenómeno social cuando se aproxima el verano, conocido como “Operación Bikini”.
Mucha gente se pone metas para fechas muy cortas y, debido a esto, empiezan a entrar prisas y buscan planes de entrenos de un mes y dietas milagrosas. Nada más lejos de la realidad, tanto esos planes de entrenamientos como esas dietas no son más que bulos que se aprovechan de la situación de estas personas.
Los mejores amigos en el mundo del ejercicio físico son: el esfuerzo, el sacrificio, la disciplina y la perseverancia. No podemos pretender que de un mes para otro nos veamos increíbles si hemos estado durante mucho tiempo fuera de nuestra forma física ideal. Para poder estar en una forma física excelente, necesitamos crear un hábito, que no es más que una acción automatizada y cotidiana. En otras palabras, es nuestro propio cuerpo el que nos pide hacer ejercicio.
Cómo podemos crear este hábito de entrenamiento
Para crear hábito de entrenamiento debemos ser constantes, es decir, en aquellos días que no tengamos ganas de hacer ejercicio, se hace igualmente. Es la única manera de que consigamos automatizar esta actividad, hasta que ya prácticamente nos salga sola. Además, tenemos que organizarnos para ver qué días de la semana podemos realizar ejercicio (esto ya depende del caso personal de cada uno).
El problema que nos encontramos al principio es que el entusiasmo nos confunde, pues parece que nos da igual todo, que lo más importante es entrenar cueste lo que cueste. No obstante, debemos ser realistas y tenemos que adaptar el entrenamiento a nuestras capacidades, para no provocar una sobrecarga en nuestro cuerpo y que acabemos abandonando el ejercicio como consecuencia de ello. No te preocupes si tu forma física no está tan bien como pensabas, con el paso del tiempo puedes ir adaptando tus entrenamientos hacia sesiones más intensas. De esta manera podrás fijar metas a medio-largo plazo, que irás poco a poco alcanzando, y te servirán como motivación para ir mejorando más y más.
¿Qué actividad física debo practicar para lograr mis objetivos?
Ten en mente que, en un primer momento, tu mayor objetivo es lograr crear un hábito. Para cumplir esta meta deberás, por lo menos, haber realizado tu rutina semanal durante 3 meses, según la regla del 3-3-3.
Una vez ya hayas conseguido lograr esta meta, las siguientes que te vayas marcando dependerá del tipo de actividad física que realices. Si cuentas con un entrenador personal, no te preocupes, pues él te irá guiando en todo el proceso y las marcará por ti de una manera realista para que no te veas superado y abandones el ejercicio.
Si entrenas por tu cuenta, nuestra recomendación es que te informes sobre el tipo de actividad que realices, para que veas cuáles son las metas realistas que puedes ir marcándote a lo largo del tiempo. De esta manera no correrás el riesgo de abandonar la práctica de ejercicio por falta de motivación al no llegar a las metas que, en teoría, crees razonables.
Conclusão
Practicar cualquier tipo de ejercicio o deporte es beneficioso para nuestro cuerpo y nuestra salud. Si queremos tener una vida longeva y encontrarnos bien, el ejercicio es uno de los fijos en nuestra lista de objetivos a cumplir. Hablando de objetivos, como has visto en este post, si quieres empezar a realizar actividad física, el principal es conseguir hacerla un hábito. Una vez ya hayas logrado crear ese hábito y sigas semanalmente tu rutina, el siguiente paso ya es empezar a marcarse pequeñas metas que te vayan guiando hacia una mayor para lograr los grandes objetivos que todos queremos.